The Frozen Tears Of Angels
[Sephiroth679]
Rhapsody of Fire
Nuclear Blast
He de reconocer que cierto escepticismo me echaba para atrás cuando me disponía a escuchar el nuevo lanzamiento de los italianos RHAPSODY (OF FIRE). Y eso que pese a ser tachados de auto-repetirse continuamente, siguen lanzando discazo tras discazo. Pero no aprendo.
Tras los sorprendentes primeros discos "Legendary Tales" y "Symphony of Enchanted Lands", parecía que el factor sorpresa se perdía, pero ellos decidieron seguir a piñón fijo con discos solo ligeramente más contundentes, como un genial “Dawn of Victory”, o incluso más con sus “Rains of a Thousand Flames” y “Power of the Dragonflame”. Su legión de fans, se incrementaba con las ideas compositivas de Luca Tirilli, los arreglos de Alex Staropolli y las voces del potentísimo Fabio Lione. Pero parecía que la cosa tenía que ceder por su propio peso, y así lo entendieron muchos cuando decidieron lanzar una segunda parte de su “Symphony of Enchanted Lands” y con los problemas legales para su cambio de nombre. Y no, RHAPSODY siguió adelante a base de temas más recargados y complejos como el nombrado SOEL II y el posterior “Triumph and Agony”.
¿Era ya el momento de llevarlos a la tumba? Pues sorprendentemente no, y quien no me crea solo tendrá que escuchar su nuevo “The Frozen Tears of Angels”. Parece casi obra de magia, pero aquellas ideas de hace más de diez años, esos arreglos manidos y repetidos por mil bandas posteriores, cobran vida de nuevo y lo hacen con total fuerza, con aire muy fresco y un sonido tremendo. Este disco me ha sorprendido gratamente en la primera escucha... pero ha sido en la segunda donde realmente he podido confirmar que es un discazo. No, no convencerá a los retractores, pero desde luego que encandilará a sus fans. Veamos porque.
Primera expilcación: porque Turilli sigue confiándose como un tremendo dominador de las seis cuerdas, ya casi olvidando el nominativo de discípulo de Malmsteen y creando su estilo propio, barroco, endemoniado e imaginativo. Por otro lado, las orquestaciones de Staropolli siguen siendo sello de identidad de RHAPSODY OF FIRE, cruzándose con las guitarras en muchos momentos para generar geniales batallas a muerte, y con esa mezcla de sonidos de órgano e incluso trompetas que ponen los pelos de punta. Y qué decir de Fabio Lione, que año tras año crece en fuerza, en matices y que parece nacido por y para esto. Potente, elegante y teatral.
A tener en cuenta también la batería de Holzwarth, en ciertos momentos muy criticado por su artificialidad, pero que en este disco se desquita: suena potente, tremendo... pero sobre todo: natural. De hecho, todo el disco ha ganado en este aspecto, sin perder su sonido peliculero, pero podemos imaginarnos fácilmente a los seis integrantes encima de un escenario, en vez de algún pasaje épico y fantasioso de un film del estilo. Sin duda es esta una de las características que más me han llamado la atención. Eso sí, Mr. Chistopher Lee sigue colaborando con sus narraciones épicas e iniciando el disco con la intro “Dark Frozen World” que sube la temperatura y pone los pelos de punta como si de un concierto se tratase.
Tras la intro, nos encontramos con una sucesión de temas llenos de épica, fuerza y folk fantasioso, como cabría esperar... pero con algo que aporta una nota nueva a su sonido. Para nada resulta pesado, sigue siendo lo que hemos escuchado de los italianos durante años, pero hay cierto matiz de frescura que lo convierte en un disco enorme. Desde la inicial “Sea of Fate” somos testigos de los veloces dedos de Turilli moviéndose por el mástil, de las orquestaciones típicas, pero en este caso más ambientales y menos protagonistas, dejando más espacio a las guitarras, y de las inconmensurables voces de Lione.
Estribillos llenos de coros, melodías vocales como siempre hemos escuchado en temas como “Crystal Moonllight”, y una guerra de solos de guitarra y teclado en “On The Way to Ainor” de más de dos minutos que quita el hipo, no solo por la filigrana técnica que desprenden, sino porque lejos de ser un mero lucimiento, están integrados perfectamente en un tema que por otro lado, es de lo mejor del disco.
Pero es que todos y cada uno de los temas del disco son obras maestras: “Reign of Terror” es francamente impresionante, un temazo con gran pegada y unos coros que acompañan de forma teatral a las sucesivas subidas y bajadas de ritmo. Por cierto, que Fabio Lione se atreve en este a interpretar voces guturales, quedando en contraste genial con los coros femeninos. Por supuesto que también seremos testigos de momentos de sonidos medievales, en este caso con “Danza Di Fuoco e Ghiaccio” y su protagonista sonido de flautas, evidentemente interpretada en italiano. Tampoco puede faltar la balada con “Lost in Cold Dreams”, llena de intensidad aunque sin llegar a otros temas anteriores de la banda como la brillante “Lamento Eroico”, pero donde de nuevo Fabio descarga todo su preciosismo y teatralidad.
El disco lo completan otro teme directo y veloz como “Ragin Starfire”, recordando a los primeros discos, con tanto clasicismo como furia, y el tema homónimo de cierre, el extenso “The Frozen Tears Of Angels”, de más de once minutos llenos de cambios, y detalles complejos, partes en ingles y partes en italiano que le dan un aire místico a las voces protagonistas. Una gran obra que pese a su longitud no solo no cansa, sino que nos obliga casi a volver a escucharla. Sería un buen resumen de lo que el disco en conjunto ofrece.
He de advertir que el disco incluye dos bonus que no fueron incluidos en la copia que se me ha facilitado, pero que por otros medios he podido escuchar: “Labyrinth of Mandes”, un buen tema pero que quedaría algo frío después de haber escuchado el resto del disco, y una efectiva y curiosa versión orquestal de “Sea of Fate”. En definitiva, un buen detalle para cerrar un disco enorme, que sobre todo aleja las dudas que podían cernirse sobre las cabezas de los italianos y que enamorará a los fans como bien llevan haciendo disco tras disco. Si el peor de sus discos no deja de ser notable, este no puede por menos que merecerse el sobresaliente.
Eso sí, aquellos que no han sabido o querido disfrutar de la música de RHAPSODY, no lo harán tampoco con este “The Frozen Tears Of Angels”. No da la vuelta a la tortilla... y por favor, ¡que nunca lo hagan!.
Tracklist:
01. Dark Frozen World
02. Sea Of Fate
03. Crystal Moonlight
04. Reign Of Terror
05. Danza Di Fuoco E Ghiaccio
06. Raging Starfire
07. Lost In Cold Dreams
08. On The Way To Ainor
09. The Frozen Tears Of Angels
10.Labyrinth of Madness (Bonus Track)
11. Sea of Fate Orchestral Version (Bonus Track)
Fabio Lione (Voz)
Luca Turilli (Guitarras)
Alex Staropolli (Teclados/Orquestación)
Alex Holzwarth (Batería)
Patrice Guers (Guitarras)
Dominique Leurquin (Guitarras)
Tras los sorprendentes primeros discos "Legendary Tales" y "Symphony of Enchanted Lands", parecía que el factor sorpresa se perdía, pero ellos decidieron seguir a piñón fijo con discos solo ligeramente más contundentes, como un genial “Dawn of Victory”, o incluso más con sus “Rains of a Thousand Flames” y “Power of the Dragonflame”. Su legión de fans, se incrementaba con las ideas compositivas de Luca Tirilli, los arreglos de Alex Staropolli y las voces del potentísimo Fabio Lione. Pero parecía que la cosa tenía que ceder por su propio peso, y así lo entendieron muchos cuando decidieron lanzar una segunda parte de su “Symphony of Enchanted Lands” y con los problemas legales para su cambio de nombre. Y no, RHAPSODY siguió adelante a base de temas más recargados y complejos como el nombrado SOEL II y el posterior “Triumph and Agony”.
¿Era ya el momento de llevarlos a la tumba? Pues sorprendentemente no, y quien no me crea solo tendrá que escuchar su nuevo “The Frozen Tears of Angels”. Parece casi obra de magia, pero aquellas ideas de hace más de diez años, esos arreglos manidos y repetidos por mil bandas posteriores, cobran vida de nuevo y lo hacen con total fuerza, con aire muy fresco y un sonido tremendo. Este disco me ha sorprendido gratamente en la primera escucha... pero ha sido en la segunda donde realmente he podido confirmar que es un discazo. No, no convencerá a los retractores, pero desde luego que encandilará a sus fans. Veamos porque.
Primera expilcación: porque Turilli sigue confiándose como un tremendo dominador de las seis cuerdas, ya casi olvidando el nominativo de discípulo de Malmsteen y creando su estilo propio, barroco, endemoniado e imaginativo. Por otro lado, las orquestaciones de Staropolli siguen siendo sello de identidad de RHAPSODY OF FIRE, cruzándose con las guitarras en muchos momentos para generar geniales batallas a muerte, y con esa mezcla de sonidos de órgano e incluso trompetas que ponen los pelos de punta. Y qué decir de Fabio Lione, que año tras año crece en fuerza, en matices y que parece nacido por y para esto. Potente, elegante y teatral.
A tener en cuenta también la batería de Holzwarth, en ciertos momentos muy criticado por su artificialidad, pero que en este disco se desquita: suena potente, tremendo... pero sobre todo: natural. De hecho, todo el disco ha ganado en este aspecto, sin perder su sonido peliculero, pero podemos imaginarnos fácilmente a los seis integrantes encima de un escenario, en vez de algún pasaje épico y fantasioso de un film del estilo. Sin duda es esta una de las características que más me han llamado la atención. Eso sí, Mr. Chistopher Lee sigue colaborando con sus narraciones épicas e iniciando el disco con la intro “Dark Frozen World” que sube la temperatura y pone los pelos de punta como si de un concierto se tratase.
Tras la intro, nos encontramos con una sucesión de temas llenos de épica, fuerza y folk fantasioso, como cabría esperar... pero con algo que aporta una nota nueva a su sonido. Para nada resulta pesado, sigue siendo lo que hemos escuchado de los italianos durante años, pero hay cierto matiz de frescura que lo convierte en un disco enorme. Desde la inicial “Sea of Fate” somos testigos de los veloces dedos de Turilli moviéndose por el mástil, de las orquestaciones típicas, pero en este caso más ambientales y menos protagonistas, dejando más espacio a las guitarras, y de las inconmensurables voces de Lione.
Estribillos llenos de coros, melodías vocales como siempre hemos escuchado en temas como “Crystal Moonllight”, y una guerra de solos de guitarra y teclado en “On The Way to Ainor” de más de dos minutos que quita el hipo, no solo por la filigrana técnica que desprenden, sino porque lejos de ser un mero lucimiento, están integrados perfectamente en un tema que por otro lado, es de lo mejor del disco.
Pero es que todos y cada uno de los temas del disco son obras maestras: “Reign of Terror” es francamente impresionante, un temazo con gran pegada y unos coros que acompañan de forma teatral a las sucesivas subidas y bajadas de ritmo. Por cierto, que Fabio Lione se atreve en este a interpretar voces guturales, quedando en contraste genial con los coros femeninos. Por supuesto que también seremos testigos de momentos de sonidos medievales, en este caso con “Danza Di Fuoco e Ghiaccio” y su protagonista sonido de flautas, evidentemente interpretada en italiano. Tampoco puede faltar la balada con “Lost in Cold Dreams”, llena de intensidad aunque sin llegar a otros temas anteriores de la banda como la brillante “Lamento Eroico”, pero donde de nuevo Fabio descarga todo su preciosismo y teatralidad.
El disco lo completan otro teme directo y veloz como “Ragin Starfire”, recordando a los primeros discos, con tanto clasicismo como furia, y el tema homónimo de cierre, el extenso “The Frozen Tears Of Angels”, de más de once minutos llenos de cambios, y detalles complejos, partes en ingles y partes en italiano que le dan un aire místico a las voces protagonistas. Una gran obra que pese a su longitud no solo no cansa, sino que nos obliga casi a volver a escucharla. Sería un buen resumen de lo que el disco en conjunto ofrece.
He de advertir que el disco incluye dos bonus que no fueron incluidos en la copia que se me ha facilitado, pero que por otros medios he podido escuchar: “Labyrinth of Mandes”, un buen tema pero que quedaría algo frío después de haber escuchado el resto del disco, y una efectiva y curiosa versión orquestal de “Sea of Fate”. En definitiva, un buen detalle para cerrar un disco enorme, que sobre todo aleja las dudas que podían cernirse sobre las cabezas de los italianos y que enamorará a los fans como bien llevan haciendo disco tras disco. Si el peor de sus discos no deja de ser notable, este no puede por menos que merecerse el sobresaliente.
Eso sí, aquellos que no han sabido o querido disfrutar de la música de RHAPSODY, no lo harán tampoco con este “The Frozen Tears Of Angels”. No da la vuelta a la tortilla... y por favor, ¡que nunca lo hagan!.
Tracklist:
01. Dark Frozen World
02. Sea Of Fate
03. Crystal Moonlight
04. Reign Of Terror
05. Danza Di Fuoco E Ghiaccio
06. Raging Starfire
07. Lost In Cold Dreams
08. On The Way To Ainor
09. The Frozen Tears Of Angels
10.Labyrinth of Madness (Bonus Track)
11. Sea of Fate Orchestral Version (Bonus Track)
Fabio Lione (Voz)
Luca Turilli (Guitarras)
Alex Staropolli (Teclados/Orquestación)
Alex Holzwarth (Batería)
Patrice Guers (Guitarras)
Dominique Leurquin (Guitarras)
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